El mayor obstáculo de Deadpool y Lobezno es la expectación de los fans

El último tráiler de Deadpool y Lobezno es bueno porque se centra en el drama más que en cameos y promesas multiversales, y eso me llena un poco más de esperanza. Sin embargo, ¿apreciarán los fans acérrimos del Universo Cinematográfico Marvel una secuela de Deadpool que preste más atención a sus personajes que a tachar nombres de una lista de deseos?

Doctor Extraño en el Multiverso de la Locura tuvo mucho éxito en la taquilla mundial y fue muy bien recibida por la crítica y el público en general, pero una parte molesta del cada vez más tóxico fandom de Marvel decidió que era una mierda porque no era el desfile de cameos inconexos que habían deseado en lugar de, ya sabes, una continuación de Doctor Extraño y WandaVision. Además, era una película del MCU que (jadeo) se atrevía a tener un estilo visual fuerte. Una película de cómics de Sam Raimi sin salsa, imagínate.

Mientras que gran parte de Deadpool & Wolverine está claramente preparando las inevitables películas de eventos multiversales que se nos vienen encima y divirtiéndose con la ya finalizada caja de arena de Fox de los personajes de X-Men, parece que el guión en realidad está tratando de dar a Wade Wilson y a su pandilla de refugiados de Fox una especie de cierre emocional antes de que se desate el infierno. Al mismo tiempo, el segundo tráiler centrado en Logan promete que Hugh Jackman no aceptó hacer otra de estas películas sólo por las risas y un buen sueldo. Podría tropezar con el problema de repetir algunos de los golpes emocionales de Logan con esta variante del personaje, pero parece que hay más en esta iteración del personaje.

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A todos los efectos, no importa si este Logan es el Logan de Logan. Deadpool & Wolverine va a lo suyo y sigue la idea de un Lobezno derrotado y magullado que se convierte (una vez más) en el héroe que realmente es... junto al idiota más adorable del multiverso. Es innegable que es una idea genial, pero luego está la cuestión de si Marvel Studios y los creativos detrás del proyecto pueden conseguir el equilibrio perfecto entre arcos argumentales convincentes y dar a los fans una bolsa llena de sorpresas.

Entrar en esta película esperando que no dé juego con todo este asunto del multiverso es estúpido. Quitémonos eso de encima primero. Si no soportas la construcción del universo de Marvel y/o todo el género de superhéroes, deberías bajarte de este tren. Dicho esto, las segundas entregas de Doctor Strange, Spider-Man: No Way Home y Loki ya nos demostraron que los poderes fácticos podrían permitir que estas historias florecieran por sí solas y, al mismo tiempo, se integraran en el multiverso más amplio y en los planes temporales de la actual saga general del MCU.

Queda por ver si Shawn Levy, Ryan Reynolds y su equipo han conseguido encontrar un buen punto entre la diversión superficial y agradable para los fans y los momentos dramáticos que puedan hacer que recordemos la película durante años. Gran parte de las victorias pasadas de Marvel Studios están ligadas a caminar casi sin esfuerzo por la línea entre el fanservice y la narración genuinamente buena, y las Fases 4 y 5 no han estado completamente desprovistas de ese tipo de magia. Pero ahora parece mucho menos habitual.

Independientemente del resultado final, me temo que los fans rabiosos ya se están preparando para una decepción que no tiene nada que ver con la calidad real de la película, sino con el hecho de no recibir todos los regalos potenciadores de la dopamina que habían deseado. Cada vez que esto ocurre, no puedo evitar acordarme del undécimo cumpleaños de Dudley Dursley en Harry Potter y la piedra filosofal.

Deadpool & Wolverine ya ha anunciado un montón de cameos divertidos, y no tengo muchas esperanzas de que Cassandra Nova, una de las villanas más extrañas e interesantes de Marvel Comics de todos los tiempos, reciba el tratamiento que se merece. En una aventura de acción y comedia de ritmo trepidante no hay espacio suficiente para desarrollar adecuadamente a todos los actores principales, así que discúlpenme si los cameos nostálgicos no están demasiado arriba en mi lista de prioridades. Sin embargo, este no parece ser un sentimiento común entre los fans. Basta con echar un vistazo a las redes sociales o a los comentarios de YouTube para darse cuenta de que todos desean una bazofia hinchada y sin sentido que rivalizaría con los eventos más sosos de los cómics de Marvel. Prefiero guardar la celebración del enorme multiverso de Marvel Studios para Vengadores: Secret Wars y conseguir algunas caracterizaciones adecuadas mientras podamos.

Doctor Extraño en el Multiverso de la Locura funcionó en última instancia porque no perdió de vista el viaje de Stephen Strange ni las consecuencias de las acciones de Wanda Maximoff a pesar de toda la acción de salto de universo que permitió a Raimi flexionar sus músculos de blockbuster mientras se deleitaba con algunos momentos de terror memorables que dieron al MCU un borde más afilado por un tiempo limitado. Los Illuminati nunca deberían haber sido más que un obstáculo a superar y un cuento con moraleja, y el guión de Michael Waldron así lo entendió. Ver a Wanda destruirlos fue satisfactorio porque representaba que Marvel Studios no caía en una trampa demasiado común del cine de franquicia. Aún no era el momento de los grandes crossovers.

Algunos detractores en el otro lado del espectro pueden argumentar que Spider-Man: Sin regreso a casa se basó demasiado en la nostalgia, sin embargo, me pareció una exploración centrada y emocional de quién es Peter Parker y por qué está condenado a nunca jamás tener una vida normal en todas partes en el multiverso gigantesco. Ya sabes, el tipo de temas que Spider-Man: Across the Spider-Verse también exploró el año pasado. Si Deadpool & Wolverine puede aplicar algo de esa energía a sus dos protagonistas y a sus problemas de autoestima, seré un cinéfilo feliz en lugar de otro consumidor satisfecho.